sábado, 24 de mayo de 2014

Hola a todos.
Con esta primera entrada intento dar comienzo a una nueva afición que viene de lejos, pero que hasta ahora no me había planteado compartirla a través de este medio. Este blog nace gracias a la inestimable ayuda de mis hijos, quienes me han empujado a esta nueva aventura, y espero que me sigan acompañando en el desarrollo del mismo.
Obviamente es un proyecto personal, sin grandes pretensiones. Tan sólo tiene la intención de compartir experiencias en torno a temas relacionados con la gastronomía. Vinos, licores, restaurantes, eventos, que en la mayoría de los casos serán vividos en primera persona y en otros serán tan sólo informativos.
No pretendo sentar cátedra. Ni mucho menos. Mi trabajo y mi dedicación es otra. Esto es una afición compartida cada día por mas gente. Tan sólo quisiera compartir esos momentos en torno a una mesa como homenaje a todas esas personas que dedican su tiempo y su esfuerzo en hacernos la vida más bonita y más sabrosa.
Por todo ello cualquier ayuda será bienvenida.

¿Por qué sobre vinos y fogones?
Porque como me dijo mi padre hace años, uno llega a unas edades en las que, si se puede, se debe intentar comer y beber bien. Y en eso estamos.
Lo cierto es que nunca había habido tanta gente interesada por el vino y la buena mesa. Hoy en día se ha convertido casi en objeto de culto para personas de todo tipo y condición, hombres y, cada día más, gracias a Dios, mujeres. Y no se trata exclusivamente de los vinos o menús más caros, sino en el consumo diario, un fenómeno que se explica, en gran parte, por las mejoras experimentadas en el terreno de la calidad durante los últimos años. Consecuencia de todo ello, ha sido la proliferación de vinos más que correctos, que ha facilitado el acceso del gran consumidor, maridados con menús especialmente cuidados, todo ello a unos precios más que razonables.

Como podreis ir observando no soy ningún erudito en la materia. No tengo formación especializada ni en cocina ni en viticultura, y además escribo como pienso y hablo. Pero esto no es óbice para que tenga opinión y criterio, y además me permita el lujo de aconsejar aquello que me ha parecido digno de ser aconsejado.

Pues nada, dicho queda.
Gracias de antemano y tened en cuenta que "para que el vino sepa a vino, se ha de compartir con un amigo" .

Blanca y Tinico, esto ya está en marcha. Gracias hijos. Sois grandes.